Las hernias no desaparecen solas.

Las hernias hiatales, umbilicales e inguinales pueden causar dolor, acidez, molestia al comer, inflamación o la presencia de un bulto abdominal.

Aunque los síntomas pueden variar, todas tienen algo en común: no se corrigen por sí solas y suelen aumentar de tamaño con el tiempo.

• Presencia de un bulto en abdomen o ingle

• Dolor al hacer esfuerzo o cargar

• Acidez, reflujo o sensación de ardor (en hernia hiatal)

• Inflamación abdominal

• Molestias que van y vienen

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¿Qué pasa si no se trata?

Una hernia puede complicarse y convertirse en una urgencia médica.
Las complicaciones más comunes son:

• Atrapamiento o estrangulación de la hernia

• Dolor intenso y continuo

• Problemas para digerir alimentos (hernia hiatal)

• Riesgo de perforación o infección

• Riesgo de cáncer de esófago y mal aliento.

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¿Cómo es la cirugía?

El tratamiento definitivo de una hernia es quirúrgico.
Realizo la reparación con técnica laparoscópica, que ofrece:

• Menor dolor

• Recuperación más rápida

• Incisiones pequeñas

• Mayor comodidad postoperatoria

• Resultados duraderos

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Mi prioridad es brindarte un procedimiento seguro, claro y con acompañamiento en cada etapa.